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Médicos Sin Fronteras cierra un centro de emergencia en la capital de Haití en medio de un aumento de la violencia de las pandillas

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La organización benéfica médica internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) dijo el miércoles que la continua violencia en la capital haitiana la ha obligado a cerrar permanentemente su centro de emergencia en Puerto Príncipe, un salvavidas clave en una ciudad ahora controlada en un 90% por bandas criminales.

Más del 60% de los centros de salud de la capital, incluido el Hospital General de Haití, ahora están cerrados o no funcionan debido al aumento de la violencia de las pandillas.

El centro de emergencia de MSF en las afueras de Tourjot cerró temporalmente en marzo después de que hombres armados abrieran fuego contra cuatro de los vehículos de la organización que evacuaban al personal. Algunos trabajadores sufrieron heridas leves.

“El edificio ya ha sido alcanzado por balas perdidas varias veces debido a su ubicación cerca de zonas de guerra, lo que haría que su reapertura fuera demasiado peligrosa tanto para los pacientes como para el personal”, afirmó Jean-Marc Biquet, jefe de misión de MSF en Haití.

El centro de atención urgente abrió originalmente en el área de Martissant en 2006, pero se vio obligado a trasladarse a Turgeot en 2021 por razones de seguridad.

Desde 2021 hasta marzo de 2025, más de 100.000 pacientes fueron atendidos en el centro.

Según la ONU, de enero a junio más de 3.100 personas murieron en Haití y otras 1.100 resultaron heridas.

La violencia de las pandillas también desplazó a un récord de 1,4 millones de personas, un aumento del 36 por ciento desde finales de 2024, dijo el miércoles la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de la ONU.

Casi dos tercios de los nuevos movimientos se registraron fuera de Puerto Príncipe, especialmente en la región central de Haití.

Mientras tanto, el número de refugios temporales aumentó de 142 en diciembre a 238 este año, dijo la OIM.

Después del asesinato en 2021 del entonces presidente Jovenel Moise, Haití se ha visto afectado por una creciente violencia de pandillas.

Los grupos armados controlan ahora gran parte de Puerto Príncipe, y la llegada de una fuerza de seguridad multinacional respaldada por la ONU en junio pasado ha tenido un impacto.

Más de 5.600 personas fueron asesinadas en Haití el año pasado, un aumento del 20% con respecto a 2023, según cifras publicadas por la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en enero.

Fuentes adicionales • AP

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