El evento se celebró en Kainan, prefectura de Wakayama, y atrajo a cientos de participantes de todas las edades.
Según la leyenda local, Kainan es considerada la cuna de los dulces japoneses, ya que fue la primera región del país donde se plantó la tachibana, que se cree que es el antepasado de la mandarina Mikan. Un total de 282 personas participaron en el intento de récord, a cada una se le entregó una pequeña casa de pan de jengibre para decorar en 15 minutos, usando chocolate, mica seca y glaseado para crear techos y paredes de nieve.
Del total de participantes, 279 fueron reconocidos oficialmente por haber completado sus premios, consiguiendo un récord para la ciudad. Los organizadores dijeron que el evento tiene como objetivo no sólo celebrar la cultura de la confitería, sino también promover la reputación de Kainan como la “Ciudad Dulce” de Japón. Familias, escolares y voluntarios se unieron a la atmósfera divertida, celebrando el orgullo y los logros festivos de la comunidad local.


