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La mayoría de los feligreses no creen que las Escrituras sean claras sobre la sexualidad, según muestra una investigación

Aunque el número de estadounidenses en edad universitaria que se identifican como transgénero está disminuyendo, una nueva encuesta encontró que la mayoría de los feligreses no creen que la Biblia sea clara sobre la homosexualidad.

El estudio de Actitudes y Cuestiones Sociales, publicado conjuntamente por el Consejo de Investigación Familiar y el Centro de Estudios Culturales de la Universidad Cristiana de Arizona, encontró que sólo el 47 por ciento cree que las Escrituras son “claras y decisivas” sobre “si la homosexualidad es moralmente aceptable”, frente al 63 por ciento en 2023.

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Más de una cuarta parte (26%) de los feligreses dijeron que creen que la Biblia es “poco clara o ambigua” acerca de la homosexualidad, un 16% insiste en que la Biblia no trata sobre la homosexualidad y un 11% dice que no está seguro.

Un porcentaje aún menor de los encuestados que asisten a la iglesia (40%) dijeron que creen que la Biblia es “clara y decisiva” sobre “si el transgenerismo es moralmente aceptable”, en comparación con el 52% en 2023. El veintitrés por ciento dijo que la Biblia es “vaga y ambigua” sobre el transgenerismo, mientras que el 24% cree que la Biblia no aborda el transgenerismo y el 11% dijo que no están seguros de si la Biblia habla del tema.

El presidente del FRC, Tony Perkins, dijo que los nuevos datos revelaban una “gran necesidad de enseñanza bíblica” sobre los “grandes temas de nuestro tiempo”, e instó a las congregaciones de la iglesia a “enseñar, vivir y defender una cosmovisión bíblica”.

Los autores del estudio concluyeron que los resultados son “aleccionadores y merecen atención pastoral”.

“Finalmente, este es un momento evangélico”, alegaron los autores. “A raíz del asesinato de Charlie Kirk, muchos jóvenes están viniendo a nuestras iglesias en busca de verdad, estabilidad y esperanza. ¿Qué encontrarán? Por la gracia de Dios, que sean sermones llenos de Escrituras, comunidades formadas por la santidad y el amor, y un discipulado que combine la doctrina bíblica con soluciones reales”.

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